viernes, 31 de agosto de 2007

"Una lagrima en el rostro de la eternidad"


Con esta sencilla frase intenta describir Tagore la belleza del Taj Mahal, construido por el dolor de la muerte del ser amado, si no por el amor en si.

Ayer yo me quede sin palabras. Para que? Lo que uno sienta al contemplarlo dependera de el mismo, de su estado de animo, del amor que albergue... pues me parecio un espejo, blanco, puro. Para Kippling representa justamente eso: "todo lo puro".

Solo dire algo que no se ve en las fotos. Su superficie de marmol esta repleta de un sinfin de piedras preciosas y sus vidrieras, tambien de marmol, siguen una tecnica de la vieja Europa. De hecho, en su construccion participaron artistas de varias partes del mundo.

Desde luego, hay que venir y vivirlo.

PD: tuve la "suerte relativa" de ir un dia de disturbios en Agra, que redujo el numero de visitantes a una cuarta parte de lo habitual. Me persiguen...

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